viernes, 29 de diciembre de 2017

MI DOBLE VIDA


Mantener una doble vida es más común de lo que parece, cuando una persona tiene un corazón dividido, es porque está cocinando dos conejos a la vez, existen estudios en la ciudad de New York donde se calcula que el 70% de los varones y el 50% de mujeres han mantenido una doble vida (relación paralela) durante algunos años de su vida, ya sea porque les resulta difícil cortar los lazos afectivos o emocionales por miedo, que tienen su origen en el alma; o también ocurre porque se encuentran atrapados espiritualmente, sumergidos en su pecado, presos de la mentira, la avaricia, la infidelidad, etc., por la ausencia total o parcial de Dios, es decir son idólatras espirituales.


Hay muchas personas que creen que cuando reciben a Cristo como Señor y Salvador ya están listos para entran al reino de Dios, ya que fueron separados de las fauces del mal; sin embargo, se les olvida considerar un detalle sublime que solo en revelación puede ser discernido: no podemos permanecer en el reino de Altísimo si seguimos enlazados a nuestra antigua manera de vivir, sin conversión, viviendo en disensión y contienda contra Dios, mis padres, hermanos, familiares o el prójimo. 

Quienes estén sometidos a su carne, permanezcan en amistad con el mundo, sus deleites, comprando al mal todo lo que ofrece para oscura intención de hacernos prevaricar y apartarnos de la presencia de Dios, están alimentando pequeños ídolos, que no son precisamente de barro o cerámica como los conocemos, sino que se presentan de manera diferentes, como por ejemplo mi ego, que al final sigue siendo ídolo, aunque no lo queramos reconocer. Marcos 3:24 “Si un reino está dividido contra sí mismo, tal reino no puede permanecer”; 1 Reyes 16:21 “Entonces el pueblo de Israel fue dividido en dos parte: la mitad del pueblo seguía a Tibni hijo de Ginat para hacerlo rey, y la otra mitad seguía a Omri”; Colosenses 3:5 “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría”.

Desde el principio, Satanás, sabía que todo reino divido no permanecería, por eso le sembró sutilmente al hombre la codicia (avaricia), el cual embelesado se postro y dobló sus rodillas al comprarle la confusión, la desobediencia y la prevaricación, apartándose del temor de Dios, perdiendo así la autoridad y el señorío que se le había dado en la tierra por mandato divino, para que la labrara y la cuidara; siendo arrebatado ese señorío del mundo por el maligno convirtiéndose este último en el príncipe de los reinos divididos. 

Génesis 3:4-6 “Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios (avaricia), sabiendo el bien y el mal (reino dividido). Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría (ego); y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella”; Mateo 12:26 “Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido (no puede porque ese es su reino); ¿cómo, pues, permanecerá su reino?”; Lucas 12:53 “Estará dividido el padre contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija, y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra (reinos divididos controlados por el mal)”.

Ahora bien, el Señor anda visitándonos a cada instante y evalúa nuestro corazón, queda de parte de nosotros velar o dormir ante su visita; muchas veces poseemos un reino dividido en nuestras vidas cuando decidimos de boca que hemos perdonados pero no de corazón, también si decimos que nos arrepentimos pero nuestras obras dicen lo contrario, o hablamos y predicamos de la conversión real en espíritu y verdad pero no la vivimos, siendo esto pura religiosidad, ya que por mis frutos seré conocido; No olvidemos que por tener el control de nuestras vidas o cedérsela a alguien, que no sea el Espíritu Santo, siempre será un estorbo, ya que esto impide que haga su voluntad en nosotros, por eso seremos responsables de nuestras acciones y recibiremos de lo sembrado en corrupción porque un reino dividido es corrupto y por ello daremos cuentas, así qué no nos sorprenda si somos hallados culpables ante los ojos del Padre, por la doble vida que hemos estado llevando.

Apocalipsis 2:5 “Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido (por llevar doble vida)”. Oseas 10:2 “Está dividido su corazón. Ahora serán hallados culpables; Jehová demolerá sus altares, destruirá sus ídolos (tu ego, tu dinero, tu bienes, tu familia, tus amigos)”. Mateo 12:25 “Sabiendo Jesús los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá”; Mateo 7:19 “Todo árbol que no da buen fruto  (que tenga corazón dividido), es cortado y echado en el fuego”.

Dios no puede dividir su reino con el mal, y mucho menos alcahuetear mi pecado, estoy con Él o en su contra, soy su siervo o soy prisionero del mal, si soy tibio o vivo mi propio evangelio, uno manipulado, es porque he querido hacer mi propio reino separado de Dios, quiero permanecer en esclavitud, andando en rebeldía, tratando de sacar de la fuente agua dulce y amarga a la vez y eso es aberración para el Señor, por eso cuando el esfuerzo de mi trabajo cae en saco está roto o mi odre se rompe por la presencia del Espíritu Santo meditemos nuestros caminos, dice la palabra, porque la confianza que tenemos en el Señor en tiempo de angustia es defectuosa y pudiéramos ser desechados. 

Hageo 1:5-6 “Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto”; 1 Corintios 1:13 “¿Acaso está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo por vosotros? ¿O fuisteis bautizados en el nombre de Pablo?”; Salmo 116:16 “Oh Jehová, ciertamente yo soy tu siervo, Siervo tuyo soy, hijo de tu sierva; Tú has roto mis prisiones”; Proverbios 25:19 “Como diente roto y pie descoyuntado es la confianza en el prevaricador en tiempo de angustia”; Romanos 11:22 “Mira, pues, la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado”.

Además, si me mantengo indefinido, viviendo doble vida entre el Señor y la mía, mi anhelo no es Cristo y su obra, es otra cosa, vivo en ocultismo y se me nota en el semblante, mis vergüenzas serán expuestas, seré indolente por las almas perdidas, no tendré el anhelo ardiente de llevarles la palabra no adulterada de salvación, me costará manifestarme como hijo suyo, me conformaré con ser siervo inútil, cumpliendo lo que me toca; mi primer amor se enfriará; Por eso el llamado es a levantarnos con la fuerza del Señor, ya es hora de reaccionar, es tiempo de que muestre en espíritu por qué fui injertado en el olivo, que del sumo de mi fruto se saque el aceite del amor que todo lo soporta y todo lo espera y como obrero vayamos a la mies que está lista, porque los tiempos se achican. 

Romanos 10:1 “Hermanos, ciertamente el anhelo de mi corazón, y mi oración a Dios por Israel, es para salvación”; Romanos 8:19 “Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios”; Romanos 11:24 “…tú fuiste cortado del que por naturaleza es olivo silvestre, y contra naturaleza fuiste injertado en el buen olivo…”.

Cristo está por venir y nosotros seguramente estaremos durmiendo con la boca abierta, deleitándonos en nuestros placeres, que vergüenza que ni siquiera queramos orar, alabar, velar o discipular una hora, prefiero complacer a la carne haciendo lo que me gusta pero no lo que edifica y glorifica al Señor, viviendo en la comodidad de mi alma, haciéndome más vil y despreciando al hermano, estorbando la obra como Jonás que no quiso llevar las buenas nuevas a las personas que lo necesitaban, negándome a pasar por la dura piedra del molino o por vituperio de este pueblo pecador, que al final igual pasaremos y contra eso nada podemos hacer; es el precio que tenemos que pagar por servir al Señor, entonces vayamos con gozo, confiados en el Señor y no posterguemos su accionar. 

Marcos 14:37 “Vino luego y los halló durmiendo; y dijo a Pedro: Simón,  ¿duermes?¿No has podido velar una hora?”; 2 Timoteo 3:4 “…amadores de los deleites más que de Dios”; Hebreos 13:13-14 “Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio; porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir”; Malaquías 2:9 “Por tanto, yo también os he hecho viles y bajos ante todo el pueblo, así como vosotros no habéis guardado mis caminos, y en la ley hacéis acepción de personas”.

Oremos: Señor, reconozco que dividido he estado, viviendo una doble vida, mi espíritu te anhela servirte fervientemente pero por estar dormido, pensando en mis propios sueños, me he dejado arrastrar por la complacencia de mi alma, perdóname; ya no quiero entrar en amistad con el mundo, guárdame de sucumbir ante mis deseos y los deleites del mal, que nada me aparte de ti. Padre celestial dices en tu palabra que el que este firme vele de no caer; Espíritu Santo revélame cómo debo velar para no caer, ayúdame a mantenerme firme sobre la roca que es Cristo. Sigue obrando hasta que llegue a decir ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí. Gracias por extender tu misericordia y darme la oportunidad de meditar en tu palabra, postrar y convertir mi vida a ti como señal de arrepentimiento y nueva vida. Te alabo y exalto Jesucristo. Te amo mi Señor, Amén.

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