Un líder revelacional es instrumento santo para
que toda persona (seguidor, creyente, discípulo) se encuentre con el Señor,
reciba del amor, misericordia y poder de su Espíritu; en su condición de líder
no existe la mezquindad, ni se envanece, ni jacta de su condición y mucho menos
existe maldad en su corazón, más bien, se goza cuando un hombre pecador es
arrebatado de las fauces del maligno, por eso le enseña la palabra y ayuda a
reconocer sus pecados, a arrepentirse y a conocer del Señor en espíritu y
verdad, para que, a través del Espíritu Santo se convierta de sus malos
caminos, reciba el perdón, la salvación y la vida eterna. Hechos 14:11-15
“Entonces la gente, visto lo que Pablo había hecho, alzó la voz, diciendo en
lengua licaónica: dioses bajo la semejanza de hombres han descendido a
nosotros. Y a Bernabé llamaban Júpiter, y a Pablo, Mercurio, porque éste era el
que llevaba la palabra. Y el sacerdote de Júpiter, cuyo templo estaba frente a
la ciudad, trajo toros y guirnaldas delante de las puertas, y juntamente con la
muchedumbre quería ofrecer sacrificios. Cuando lo oyeron los apóstoles Bernabé
y Pablo, rasgaron sus ropas, y se lanzaron entre la multitud, dando voces y
diciendo: Varones, ¿por qué hacéis esto? Nosotros también somos hombres
semejantes a vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis
al Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, el mar, y todo lo que en ellos
hay”.
martes, 28 de abril de 2020
BERNABÉ, LÍDER REVELACIONAL
lunes, 13 de abril de 2020
¡EXTRA, EXTRA!, MI NOMBRE ESTÁ ESCRITO
Sin embargo, hay unos detalles que quiero resaltar y no puedo dejar pasar por alto, por eso quisiera retomarlos aparte:
sábado, 11 de abril de 2020
LA VOLUNTAD QUE QUIERO
domingo, 5 de abril de 2020
TOCAR EL CORAZÓN
Hay estudios científicos que avalan que el contacto de un bebé con su madre, desde los primeros años de vida, es primordial para estimular las terminaciones nerviosas y brindar un sentido de seguridad al niño.
Dentro de las relaciones de pareja sucede exactamente lo mismo, el contacto físico, emocional y espiritual trae consigo una gran cantidad de beneficios que se escapan de nuestra comprensión humana, por eso es importante demostrar afecto por medio del contacto. Un grupo de investigadores Norteamericanos se dio a la tarea de investigar cuánto contacto tenían las parejas en una cafetería dependiendo de su procedencia cultural, obteniendo como resultado que las personas de descendencia latina se tocaban hasta 180 veces al día. Sin embargo, los de cultura anglosajona, tan solo lo hacían dos veces.
La Dra. Tiffany Field, Directora del Touch Research Institute a Healthline trató de explicar científicamente cuales son los beneficios del tocar a la pareja: “Si alguien en quien confía toma su mano, lo abraza o le da un masaje en la espalda antes de tener una tarea estresante como dar un discurso, su ritmo cardíaco disminuye, la presión arterial disminuye y sus hormonas del estrés disminuirán. También hay un aumento en la oxitocina, que es la hormona del “amor” que contribuye a la relajación en las parejas”; la reacción en nuestro cuerpo, nuestros sentimientos y nuestra vida espiritual cambia cuando recibimos la información de que hemos sido tocados por nuestra pareja, por nuestros padres, hijos, amigos o por Dios.
Al escuchar un "Te amo" o un “Te perdono” de la persona adecuada puede sanar heridas, liberarte de un extenuante yugo, peso o dolor, más que otras mil cosas que se puedan recibir; y aunque puede ser suave caricia, que toca tu corazón, tu ser, necesita que lo intangible o contacto invisible, se convierta en tangible, en una caricia manifestada a través de hechos y no solamente palabras, que pudieran ser vacías o muertas, sino a través de los testimonios vivos de amor que se manifiestan con hechos. Tocar de esta forma es crear una conexión profunda por eso nunca debemos rechazar una caricia como esta.
El amor está compuesto de: respeto, comunicación, confianza, cariño y permanencia, está es la manera de TOCAR en espíritu, ya que es la forma de tocar el corazón de Dios. Utilicemos este acróstico para entender, en Espíritu y verdad, esta hermosa enseñanza que es aplicable a los matrimonios y a nuestra relación con Dios:
1. [T] Temor (Respeto):
No pretenda, ni quiera, cambiar a su pareja a la fuerza, manipulación o coacción porque eso es una insensatez, así no se toca un corazón. Si amamos a una persona debemos respetarla con todo su combo: lo bueno y lo malo. Esto ha sido la clave en muchas relaciones, el respeto de las particularidades de cada uno hace la diferencia, pero es necesario someter y ajustar nuestro carácter a lo que nos hará crecer y edificar en Dios. Por ejemplo, el Señor desde la creación ha buscado que el hombre sabio, conozca su bondad, su amor, su misericordia, su benignidad, se mantenga en santidad, sepa diferenciar entre lo bueno y malo, a través del TEMOR de Dios para tocar su corazón, Proverbios 1:7 “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”; que nuestra conversión y obediencia sea de corazón, por motus propia, no impuesta; solo al hombre se le dio el don de decidir, el de tener voluntad propia; sin embargo, la hemos utilizado para hacer el mal, llenarnos de soberbia, desatarnos a los deseos engañosos, a los deleites de la carne, etc., y aún así, Dios nos perdonó todo en la cruz, a los que nos arrepentimos y pedimos perdón, a los que creemos en su nombre y hacemos su palabra; Él es respetuoso de nuestras decisiones, sin embargo nosotros no le tenemos respeto (temor) a Él y por eso daremos cuenta en su tiempo, acordémonos que vivimos en una sociedad moderna, pero no pertenecemos a ella, ella está condenada a sufrir por lo que ha sembrado: maldad.
Así como la casa es nuestro refugio, también nuestro cuerpo es el tabernáculo, el templo, el refugio de nuestra vida espiritual. Nadie en sus cabales y en tus justos juicios mancilla tu casa, llevando el pecado a su lecho; el Señor espera que estemos preparados para su venida, nos mantengamos santos y nos presentemos como una iglesia, como la esposa del Señor, limpia, pura y sin mancha para ganar su corazón. Malos días puede tenerlo cualquiera, sin embargo no hay que volver como el perro a su vómito, tragando la inmundicia de nuestra torpe manera de actuar, o descargar nuestra iniquidad en nadie de la casa; es mejor llevar nuestra vida a los pies de Señor, quién nos limpiará y enderezará nuestros pasos, haciéndonos descansar.
Hay que aprender a gestionar nuestras emociones con el Espíritu Santo, menguando, evitando conflictos, celos y disensiones respetando el espacio de Dios, el espacio personal de tu pareja, así como el Señor respeta el nuestro. Existen momentos agradables, de edificación, búsqueda de Dios, y hay momentos de interacción con otros que complementan el gozo, por eso el Señor dijo ya no serán más dos sino uno. Si se tienen hijos, hay que respetar el tiempo para compartir con ellos, es necesario, y cada vez que el Señor lo permita, también debemos propiciar momentos para cenar con su pareja y alimentar el amor de parejas, sin la familia, para mantenerse conectados de corazón, como Cristo y su iglesia.
2. [O] Oración (Comunicación):
Cuando nos comunicamos hay que hacerlo de manera empática, inclusive cuando discutimos, sujetos al Señor, es decir, escuchando atentamente y sin señalamientos o prejuicios. Utilizar el "yo creo que..." en vez del "es que tú has hecho..." es lo más conveniente. Orar es una forma de comunicarnos con Dios, el Señor se ha comunicado con nosotros de manera asertiva desde siempre, nos ha dejado su palabra, el Espíritu Santo para guiarnos, enseñarnos y redargüirnos para que no nos extraviemos o perdamos, ha expresado de manera clara las instrucciones y ha señalado que la oración es la vía de comunicación más eficaz. Mateo 26:41 «…Manténganse despiertos, y oren…», 2 Reyes 20:5 «…Yo he oído tu oración, y he visto tus lágrimas; he aquí que yo te sano…»; si queremos tocar el corazón de Dios, o queremos tocar los corazones de quienes amamos, debemos orar fervientemente.
Es necesario orar por nuestra pareja y comunicarnos con ella, para que sepa lo que pensamos, sentimos o actuamos (Dios es el único que nos conoce internamente), y podamos de esta manera tocar su corazón, es un error creer que ya lo sabe de antemano si no se lo hemos manifestado. Las pinceladas de amor pueden ser subjetivas y si no hay discernimiento en el Espíritu nunca la entenderemos; lo mejor es expresar lo que uno piensa o siente y no darlo por sentado, hay que tocar el corazón de su amado o amada, le recomiendo que sea cuando vayan juntos a la cama, cerrando la puerta, en ese mismo momento, sin distracciones, apagando la Tv, el celular, es importante la comunicación y oren juntos.
3. [C] Confianza (Comunión):
La palabra dice en Hebreos 11:1 “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”; tener fe es tener confianza, pero para tener confianza es necesario tener comunión con el Señor de sincero corazón; el arrepentimiento es confianza, es tener la certeza de que nos va a perdonar, el primer paso para limpiarnos y convertirnos; si no lo hacemos es porque andamos en comunión con otra cosa, ya sea la carne, el mundo o el mal, acumulando pecado, odio, resentimiento, rencor, etc., ese veneno que va dejando pasar las pequeñas cosas y un día nos explotará en la cara y traerá muerte.
El que confía en el Señor, todo lo espera, todas las cosas ayudan a bien, no se afana por las circunstancias, entra en comunión; por ejemplo, evita espiar a tu pareja o leer los mensajes de su móvil, no le incomoda ciertas actitudes ni se queja por lo que está viviendo; expresa y conversa con tu pareja en amor antes de irrumpir su intimidad, sembrar celos o desconfianza. Vivamos tiempo de calidad en todo momento, sobre todo en estos tiempos cuarentena, de recogimiento por el Covid19, el cual es una oportunidad preciosa que nos está regalando el Señor para fortalecer la fe, confianza, comunión para enlazar nuestros corazones como familia, sentir sus necesidades, acariciarlos, sembrar la palabra para bendición y edificación. Procuremos momentos de intimidad y comunicación para ser de un mismo sentir y finalizar el día unidos, hasta que acabe nuestra existencia terrenal y nos reencontremos en el reino eterno.
4. [A] Afecto (Cariño, amistad):
Dedicarle momentos de calidad a su pareja es vital para tocar su corazón, puede ser que sea poco tiempo en el día, pero lo necesario es que sea de corazón, de manera real y pura, por ejemplo, compartir una tierna caricia, un beso santo, un fuerte abrazo, inclusive momentos de mucha pasión en la intimidad, de manera frecuente fortalece los lazos de amor. Expresar amor y afecto de manera frecuente, con palabras y gestos que toquen nuestros corazones es importante, muchas personas dejan de abrazarse, darse la mano por la calle, caminar juntos, etc., porque creen que están viejos, que es cursi, fastidioso, fuera de lugar como si estuvieran cometiendo un pecado o delito, cuando realmente es un signo de que son incapaces de dar y recibir amor. A menudo uno de los dos puede no sentirse lo suficientemente querido pero no se atreve a decirlo. Alimentar a la pareja con pequeños detalles, quizás esos mismos que tenían cuando eran novios (Un mensaje de texto, una llamada, una nota, un desayuno en la cama, etc.) y que han olvidado sin querer, es el inicio de retomar y volver a reencontrarse con el amor perdido, es encender la llama, porque el amor no deja de ser y siempre persigue tocar el corazón del otro.
Así mismo es el amor de Dios, Él espera que volvamos al primer amor, nos ha consentido de tantas maneras y formas que no deberíamos nunca de dejar de darle gracias, pero nuestro duro corazón, la necedad de mulo entendimiento, nos ha impedido ver lo bueno, lo puro y lo santo, que ha traído gozo, paz y bendición a nuestra vida; entremos en amistad con el Señor y dejemos que nos llene de su presencia, para recibir el amor y afecto que nuestro corazón necesita, para alabar y adorar su nombre.
5. [R] Restauración (Resistir, Perseverar, Permanecer,
Persistir):
Para finalizar, todo se debe hacer en pareja de tres, para ser un solo equipo. ¿Por qué en pareja de tres?, Claro si somos una sola carne como matrimonio, si somos la esposa del esposo como iglesia familiar, entonces el Señor y nosotros somos tres: esposa, esposo y Cristo para ser uno. Por eso para tocar el corazón de Dios, debemos restaurar nuestra relación con Él, resistir las asechanzas del diablo, perseverar en la palabra, permanecer en su presencia y persistir en sus caminos, Bendito sea el Señor por los matrimonios, por la iglesia del Señor, por las familias que oran unidas, Gracias al Señor porque nos reconcilio con el Padre y podemos ser uno con Él a través de Él.
Oremos:
Tocar tu corazón es mi anhelo, Padre de los cielos, por eso hoy me postro
en tu presencia, con un corazón contrito y humillado, para que mi oración
llegue como olor fragante a tu trono; Señor perdona el pecado de tu pueblo,
reconocemos que no hemos tenido Temor de ti, a pesar de que ha llegado tu
palabra por tanto tiempo, hay rebeldía en nuestros corazones que ha hecho que
nos neguemos a cumplirla, perdona si te hemos fallado, sé que nuestra oración
ha sido débil y nos conformamos con tan poco, nuestra confianza no ha sido tal,
nos hemos dejado arropar por las voces del mundo, creyendo más en lo que dicen
los gobernantes, líderes y médicos que en ti Señor, perdóname por mi poca fe.
Igualmente nos ha faltado orar más por nuestros semejantes, el amor, afecto y
piedad por sus almas ha sido pobre, fortalécenos para ser columna y ayudar a
sostener a los más débiles, te pido perdón si no hemos resistido antes las
asechanzas del mal, si hemos dejado puertas abiertas que no edifican nuestra
vida, cierra Señor esos portillos y guárdanos de pecar contra ti. Gracias Señor
porque tú has dicho en tu palabra que clamemos a ti y recibiremos respuesta;
Señor ten misericordia de los pueblos que sufren por están pandemia del
Covid19, te pido por mi nación que está sumergida en la confusión de su pecado,
guarda a tu iglesia que sufre persecución a nivel mundial y levanta una iglesia
santa de acuerdo a tus propósitos eternos. Bendito sea tu nombre, que está
palabra no caiga en tierra árida, ni regrese vacía, glorifícate Padre de los
cielos y quedamos en tu santa presencia. Amén