Estaba recordando que de niño,
aproximadamente a los 11 años finales de los años 70, había un club familiar
que pertenecía a la antigua PTJ, a orillas de la playa, vía a Santa Cruz de
Mara, en la parte norte del estado Zulia, saliendo de Maracaibo; en él se
encontraba un estadio donde se jugaba beisbol y softbol, allí mi Padre adoptivo
y mi Tío jugaban softbol con un grupo de amigos de la urbanización San Jacinto,
lo que no recuerdo claramente si eran los fines de semanas; el hecho es que
allí, a orillas de la playa había la famosa caña brava, con la cual, Henry, un
amigo de la infancia vecino de Mamayola (Mi abuela Yolanda), y yo, la
utilizábamos para construir petacas (Volantines o papagayos), en ese tiempo no
existían las computadoras ni celulares, si acaso existía el ATARI, los primeros
juegos de vídeo, pero en mi vida lo había visto o jugado.
No se me olvida que en ese lugar
caluroso, hacían concursos de papagayos y dibujos, donde participé en tres
oportunidades y gane con mis habilidades creativas y artesanales: En el primer
concurso, con un Volantín me gane una pelota de beisbol (tercer lugar),
realmente no era muy bonito ni esplendoroso pero voló sin viento y ese era un
requisito y por eso llegue de tercero, y en los otros, un segundo lugar con un
dibujo del Escudo Nacional y mapa de Venezuela, pintados con creyones de cera y
algodón, y algunos detalles estaban en relieve pintado con tempera, donde me
destaque y me gane un bate de madera hermoso y un guante.
El hecho más significativo de
esta experiencia, fue haber asistido en la primera oportunidad, con mi “Hachifuga”
(Petaca feíta por demás) al extinto "Diario Crítica", el cual se
encontraba casi al final de la avenida Bella Vista por las inmediaciones del
cine Ávila en la afamada ciudad occidental, a una entrevista y a sacarnos una
foto por tal representativo concurso, fue emocionante; pasar por las puertas
del periódico y pensar que tres niños desconocidos apareceríamos entre sus
páginas, era un sueño, salir fotografiado en el segundo diario más importante
del estado, para mí fue lo más maravilloso que me había ocurrido en mi corta
existencia, ver mi nombre escrito y mi cara de espanto en ese medio de
comunicación impreso no tenía precio.
Sólo mis amigos periodistas saben,
por experiencia, que la mayoría de las personas les encanta ver sus nombres en
las noticias, sobre todo en las de sociales y deportes, mientras sean para
cosas agradables como estas, y muchos hasta comprarían la edición completa para
compartirlos con todos sus amigos y fanfarronear un poco, pero este no fue el
caso, lo más agradable fue ver mi nombre impreso en sus páginas y pensar que cualquier
persona, que ni siquiera me conocía, lo leería, escucharía o mencionaría mi
nombre, eso me hacía sentir muy alegre en el corazón, la inocencia de un niño.
REQUISITO PARA ESCRIBIR MI NOMBRE EN EL LIBRO
La palabra de Dios dice en
Apocalipsis 3:5 “El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no
borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi
Padre, y delante de sus ángeles”; leer este versículo me puso a reflexionar, si
este hecho tan insignificante hoy, hizo que mi corazón se acelerara de emoción
en su momento, imagínense el gozo que sentirá aquella persona que aparezca su
nombre escrito en el libro de la vida que es para toda la eternidad, que maravilloso será escuchar una voz de
trueno en los cielos pronunciando su nombre, la voz del Cordero diciendo al
Padre y a todos los ángeles “Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia”
Mateo 3:17.
¡Guao! Me quebranto de sólo en saber
que la gracia del Dios está con nosotros y para siempre es su misericordia, es
para no dejar de adorar y alabar al Señor por el resto de nuestros días acá en
la tierra, ahora entiendo porque Moisés se postró ante el Señor cuando le pasó
por el frente: Éxodo 34:6-7a “Y pasando Jehová por delante de él, {Moisés}
proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la
ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que
perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por
inocente al malvado;…”; sabemos que el Señor vive visitándonos a cada rato, pasándonos
por el frente sin darnos cuenta, vive trayéndonos libertad y bendición, gracias
al sacrificio que hizo en la cruz, por eso es que tenemos salvación, vida eterna
y estamos inscritos en el libro de la vida; Daniel 12:1c “…pero en aquel tiempo
será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro”; Juan
14:6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al
Padre, sino por mí”.
Sin embargo, hay unos detalles que quiero resaltar y no puedo dejar pasar por alto, por eso quisiera retomarlos aparte:
Sin embargo, hay unos detalles que quiero resaltar y no puedo dejar pasar por alto, por eso quisiera retomarlos aparte:
Es evidente que
existe un requisito para que su nombre deba aparecer escrito en el libro de la vida ya
que “De ningún modo tendrá por inocente al malvado”; a pesar de que
la gracia existe y está presente, y que su fuerza y poder nos acompaña, hay una
justicia que se tiene que cumplir, porque Dios es justo y no existe impunidad,
entonces ¿Qué puede ocurrir? Que seamos borrado del libro de la vida porque
pecamos conociendo la verdad, sino por qué dice “No borraré su nombre del libro
de la vida”; Hebreos 10:26 “Porque si pecáremos voluntariamente después de
haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los
pecados”; hay que tener temor santo, ya que podemos estar fallando por la falta de disposición de nuestro corazón para seguir
los caminos del Señor, la palabra dice en el Salmo 84:5 “Bienaventurado el
hombre que tiene en ti sus fuerzas, En cuyo corazón están tus caminos”; si
Jesús es el camino, y si “nadie viene al Padre” sino es por Él, entonces ¿Qué
nos hace falta para que mi nombre aparezca en el libro de la vida? Vencer, y “El que venciere” será vestido de vestiduras blancas,
con vestiduras de gloria.
VENCER ES UNA ACCIÓN, NO UNA INTENCIÓN
Nuestra alma tiende a satisfacer
los deseos de la carne, el cual nos conduce a engendrar pecado, corrompiendo nuestras
vidas espirituales, pero eso es producto de: Jeremías 1:16 “Y a causa de toda
su maldad, proferiré mis juicios contra los que me dejaron, e incensaron a
dioses extraños, y la obra de sus manos adoraron”; muchos hijos de Dios han dejado
sus caminos, aun estando asistiendo regularmente a la iglesia por falta de
conversión, he visto que muchos hermanos han puesto a los pastores, lideres, o
mentores espirituales de primero ante que al Señor, y cuando se les cae el
ídolo, se les cae la fe, es triste ver como excelentes siervos se pierden
espiritualmente hablando cuando ven al hombre, creen que es el hermano ungido, más inteligente, más santo, más
preparado, etc., hasta que su maldad es develada; no basta con las intenciones
de buscar a Dios, porque podemos perdernos en la idolatría; vencer es una
acción genuina, la fe hay que ejercerla, es tener la certeza que Cristo es el
Señor, Rey y Pastor, es quién tiene el control aunque los hechos digan lo
contrario, porque allí es donde se prueba fe de los hijos de Dios.
En Jeremías 1:17-19 dice “Tú,
pues, ciñe tus lomos, levántate, y háblales todo cuanto te mande; no temas
delante de ellos, para que no te haga yo quebrantar delante de ellos. Porque he
aquí que yo te he puesto en este día como ciudad fortificada, como columna de
hierro, y como muro de bronce contra toda esta tierra, contra los reyes de
Judá, sus príncipes, sus sacerdotes, y el pueblo de la tierra. Y pelearán
contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para
librarte”; vencer es ceñir nuestros lomos para ser libres, es apretarnos el cinturón
de varón espiritual, levantarnos entendiendo que bueno no hay ni uno solo, solo
Dios, dejémonos de tonterías almáticas y vayamos a cumplir la gran comisión, y
si es necesario, exhortar a los hermanos, sabiendo que Dios está contigo, si es
que el Espíritu de Dios está en ti.
Por tanto hagamos como dice 2 Crónicas
7:14 “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren,
y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré
desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”; humillémonos,
postrémonos en su presencia, oremos, invoquemos su nombre, busquemos el rostro
de Cristo, convirtámonos, encarrilémonos en sus caminos, para que seamos
escuchados, perdonados y sanados y podamos vencer, esforcémonos por permanecer
inscritos en el libro de la vida. No creamos que con el puro cristianismo barato
ya estamos hechos, si queremos regocijarnos tenemos trabajar, si queremos ver
los frutos y vencer hay que esforzarse pero con el Cristo vivo, resucitado, el Cristo
que no es letra muerta, ni está colgado en la cruz, sino que es una realidad
hecha carne en mi carne. Lucas 10:20 “Sin embargo, no os regocijéis en esto, de
que los espíritus se os sometan, sino regocijaos de que vuestros nombres están
escritos en los cielos”; Apocalipsis 2:17 “El que tiene oído, oiga lo que el
Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido,
y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el
cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe”.
REFLEXIÓN
El Señor nos advierte que “No
entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino
solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero”
Apocalipsis 21:27; No entrará al reino de los cielos ninguno que no haya
vencido, el que haya preferido la inmundicia, la impiedad o maldad, está
errando; porque ni injustos, “ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los
adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones,
ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores,
heredarán el reino de Dios” 1 Corintios 6:9b-10; llegó el tiempo de ponernos a
cuentas con el Señor y abandonemos nuestra actitud de rebeldía, las señales de
los últimos tiempos ya se están manifestando, el Señor Jesucristo está por
venir pronto y será la hora de leer los nombres de los vencedores, aquellos
quienes están inscritos en el libro de la vida, los que tienen escritos sus nuevos
nombres en la piedra blanca de la vida; hoy es el tiempo de arrepentirse, recuerde que el pecar conociendo la verdad puede ser irreversible, trae muerte
a nuestras vidas; 2 Pedro 2:21 “Porque mejor les hubiera sido no haber conocido
el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del
santo mandamiento que les fue dado”.
Jeremías 30:18-22 “Así ha dicho Jehová: He
aquí yo hago volver los cautivos de las tiendas de Jacob, y de sus tiendas
tendré misericordia, y la ciudad será edificada sobre su colina, y el templo
será asentado según su forma. Y saldrá de ellos acción de gracias, y voz de
nación que está en regocijo, y los multiplicaré, y no serán disminuidos; los
multiplicaré, y no serán menoscabados. Y serán sus hijos como antes, y su
congregación delante de mí será confirmada; y castigaré a todos sus opresores.
De ella saldrá su príncipe, y de en medio de ella saldrá su señoreador; y le
haré llegar cerca, y él se acercará a mí; porque ¿quién es aquel que se atreve
a acercarse a mí? dice Jehová. Y me seréis por pueblo, y yo seré vuestro Dios”;
Apocalipsis 21:3-4 “Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el
tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su
pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. Enjugará Dios toda lágrima
de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni
dolor; porque las primeras cosas pasaron”; Apocalipsis 21:7 “El que venciere
heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo”. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario